domingo, 8 de mayo de 2011

Tanto que decir y tan poco papel...

Hablaba y hablaba. Sentía que tenia que soltar todo lo que había estado guardando durante tanto tiempo. Sabía que ya era suficiente al ver sus caras, pero tenía la necesidad de contarlo todo. Por primera vez. Sin remordimientos. Hablaba y hablaba. No callaba ni a la de tres.¿Pero si no era ahora cuando?. Para que dejarlo correr. Mejor no callar más. Mejor que sonreír sin más.
Una vez que terminó, y vio las caras de todos se echó a llorar. Todos les sonreían. Se sentía feliz, por que por primera vez después de soltarlo todo, le sonríeron en vez de discutir todo lo que había dicho. Todos estaban de acuerdo con ella. Todos compartían sus pensamientos. Todos estaban tan unidos, que no podían pelearse. Ni si quiera imaginarselo. Estaba terminantemente prohibido.

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