Cariño, hoy estoy aquí sentada frente la pantalla del ordenador para decirte como me he sentido hasta el día de hoy, así que espero que cuando leas esto, te pares a pensar en mis sentimientos. Nunca me ha sido fácil llegar hasta donde estoy ahora, por que sí, por que aunque tenga 16 años mi vida ha sufrido varios cambios bruscos. Uno de ellos fue por mi culpa, por no pararme a pensar lo que iba a decir cuando ya lo había dicho y de la peor forma en la que una puede decirlo, gritando. Otro caso fue el profundo desengaño, me sentía vacía por dentro, incluso por fuera. Era extraño pero había ocasiones en las que estaba más tiempo en mi mundo que en La Tierra. Por desgracia fue el peor de los cambios y hoy en día sigo recordándolo. Sin embargo no te miento si te digo que echo de menos estar enamorada, sentir como se me aceleraba el pulso al verte... cosa que dejó de pasar algunos meses atrás. No creo que esto sea una buena sensación, ya que prefiero que el olvido ocupe toda mi mente antes de ser demasiado tarde para despedirte. Y sí, lo sé, que el corazón siempre va un paso por delante del trabajo de mi mente y que tarde o temprano volveré a caer, por que todas tenemos un Judas en nuestra vida, por que todas nos arrepentimos de echos imborrables del pasado, de habernos saltado un paso muy importante... ''nuestro primer te quiero entre nubes de algodón'', pero para eso está mi sonrisa, mi fuerza, mi día a día. Sí, lo he conseguido, he superado el primer paso y no pienso retroceder, no pienso volver a perder ante esa sonrisa. Por que ahora eres tú el ingenuo, el iluso y el tonto, por que ahora me toca ganar a mi.
