sábado, 1 de diciembre de 2012

Dejaré de huir.

Te echo de menos y no te conozco.
Te he estado buscando durante tanto tiempo, que tanto se queda corto. Buscaba por todos lados y a la vez huía donde había destellos de aquello. No sabía ni por qué, ni cómo. 
Temía acabar llorando como aquella vez, o simplemente acabar herida por no poder hacer nada. Necesitaba encontrar algo cercano, posible. Sin embargo, seguía huyendo. Uno, otro, y otro más. Me acababa escondiendo de mi misma. Y ahora, de repente como si nada... PUM. Mi corazón empezó a desbocarse, mis ojos empezaron a brillar y mi voz, bueno... mi voz se perdió por aquel largo pasillo.
Te vi, y me llamaste la atención. No me paré a pensar en ti de aquella forma, sin embargo algo cambió. Te volví a ver una y otra vez, y sentía como poco a poco te buscaba, te veía por todos lados y sin quererlo sonreía como una tonta mirando el Sol por primera vez.
No se si es tarde, pero quiero intentarlo. Sé que volverá a fallar, pero aún así creo que valdrá la pena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario