sábado, 12 de abril de 2014

Sobreviviendo.

Prometí no volver a escribir nunca más cuando estuviera melancólica, a punto de tirarme de los pelos. Y bueno, aquí estoy, no puedo parar. No puedo fingir, negar como me siento, no puedo engañarme más a mi misma intentando comprender algo que no tiene ni pies ni cabeza. ¿Dónde está todo mi tiempo perdido?
Simplemente quiero librarme de estas cadenas, someterme a la locura y la memoria a corto plazo, las noches largas y los días insalubres. Comida rápida y para llevar, de tu boca a la mía. Pasitos ligeros pero sin prisa, cogidos de las manos. Que salga el Sol y me alumbre el día, que llegue la fiesta y tus brazos para bailar. 
De usar y tirar, solo los pañuelos, que aún tengo mil lágrimas que derrochar. Ni te pienso, ni te olvido. Ni me escondo, ni te busco. ¿Dónde está el café y qué hace que no está con nosotros en el sofá? Si pudiera ser, sería tu película preferida. Si pudiera negar sería a tus miedos. Si pudiera volar, sería contigo...
Ni contigo, ni sin ti. Ya no sé como vivir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario