Lo que te duele no es que te hayan dejado con las manos vacías en medio de la calle llorando, lo que te jode es que te haya pasado la mano por la cara varias veces, que te lo haya robado sin ningún motivo. Y sí es verdad, era tuyo, lo que más querías hasta hace 5 minutos, ¡¡pero piensa joder!! que no todo se acaba cuando alguien te deja o simplemente no te corresponde. Cuando estés verdaderamente sola y sin nadie a quién acudir, entonces podrás llorar y patalear cuanto quieras. Mientras, piensa en tus errores y busca remedios para que no te vuelve a pasar por tercera vez.
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